El Chupete

El chupete, considerado como el mejor amigo no sólo de los bebés, sino también, de los padres, está rodeado de grandes miedos a la hora de su uso.

Existe evidencia del uso de chupete desde hace ya más de 3.000 años. Nuestros antepasados también buscaban la manera de calmar el llanto de los más pequeños mediante la succión no nutritiva.

Muchos padres creen que el chupete influye negativamente en el desarrollo de la dentición, que predispone a padecer otitis, que altera la lactancia materna, etc.

Aquí os dejamos unos datos útiles:

• El uso del chupete consigue la disminución de casos del Síndrome de Muerte Súbita Infantil.
• Su uso a partir del mes de vida del bebé no influye en la lactancia materna.
• El uso del chupete favorece la correcta posición de la lengua, ayuda a elevar levemente los niveles de dióxido de carbono en sangre y el tono muscular de las vías aéreas del bebé.
• Ayuda a confortar al bebé entre toma y toma, ya que hasta los 18 meses el bebé tiende a explorar el entorno mediante la boca.
• Se evita el uso de los dedos para calmar al bebé. Este hábito es más complicado de eliminar y puede provocar deformaciones en el paladar.
• Por el contrario el uso del chupete no interfiere en el desarrollo óptimo del paladar ni de los dientes, siempre y cuando no se use a partir de los 18 meses.

Y unas recomendaciones para su uso:

En el caso de los niños amamantados, debe ofrecerse el chupete cuando el niño ya ha cumplido el primer mes de vida, para asegurar que la lactancia se encuentre bien establecida.

Antes del primer uso hay que esterilizarlo inspeccionar el chupete antes de cada uso para comprobar que no este roto ( sobre todo si el niño tiene dientes)

• Hay que mantener unas condiciones buenas de limpieza, lavándolo con agua y jabones neutro.
• Evitar que otros hermanos lo utilicen.
• Ofrecer, en principio, el chupete a la hora sueño diurno y nocturno.
• No introducir el chupete mientras el niño está dormido.
• Nunca hay que sumergir la tetina en sustancias dulces o medicamentosas, ya que pueden inducir la aparición de caries en los primeros dientes.
• Nunca exponer los chupetes a fuentes de calor más allá del tiempo recomendado para la esterilización.
• Emplear el uso de cadenas y pinzas homologadas junto al chupete ya que el uso de las no homologadas pueden ocasionar estrangulamientos.
• No obligar al niño a utilizar el chupete.

Fuente: Estar vital y Zona pediátrica